¿Por Qué?
A veces me pregunto:
Por qué te quiero tanto?
Por qué me quieres tanto?
Por qué te celo tanto?
Por qué me celas tanto?
Por qué mis ojos
producen ese llanto
cuando estamos juntos
y te hablo de mis problemas
que fluyen sin emblemas
del sol de mis antojos?
Por qué te deseo tanto?
Por qué me deseas tanto?
Por qué te pienso,
te nombro, te miro,
te calco sobre un lienzo
con tu alma en un suspiro?
Por qué siento tu aroma
adormecida entre mis brazos?
Por qué tu fragancia
me persigue y me toma?
Por qué admiro tu delicia
con la que me mira,
me abraza y me acaricia?
Por qué siento tu voz
y la confundo con la lira?
Por qué al besarte
me interrumpes y suspiras?
Por qué, por qué, por qué...
... no puedo dejar de amarte?